martes, 18 de agosto de 2009


Señor Mi Dios

Señor mi Dios, contemplo el cielo,
y veo el azul magnífico de tu presencia,
teñido con el blanco de tu omnipotencia…
Miro un poco más abajo
sin dejar de ver tu grandeza,
y observo el verde de la vida…
Que nos prodigas, y que revalida
tu existencia, siento la arena
en la caricia… y me prueba
lo inmenso de tu amor…

Advierto la brisa suave y fresca
que me hace sentir la calidez de
tu sonrisa, percibo el calor
del sol que me abraza,
y descubro tu desmedido amor...
Escucho la percusión de las olas entre sí,
aclamándote en consonancia
con mi corazón, y he aquí…
Que ratifico en tu paciencia,
que eres infinitamente sabio y poderoso…

Y que si mis vocablos son escuchados,
será por que tú me has inspirado…
¡Todo viene de ti!, la lluvia que prodiga
de vida nuestro suelo, y la belleza que en tu
presencia es íntegra... ¡Cuando veo al cielo!
y si tú lo apruebas, mi voz que es
dádiva tuya, será escuchada…
Señor hoy necesito decirte que jamás,
me he sentido más viva, ¡que en este momento!...
Que tengo esta ilusión, tan única para mí.

Y es cuando veo la posibilidad
de existir...Aun cuando
ya estoy aquí... No creo que sea
simple vanidad, más si es descubrir
a la niña, a la Mariana que nunca existió…
Y que siempre fue realidad en la sombra
de mi fantasía... Señor las lágrimas
brotan de mis ojos cual compuerta abierta
sin poder contenerlas… Y es que en verdad
no puedo dejar de verterlas…

Señor anhelo desbaratarme
en agua, aquí en la playa;
y fundirme con el torrente
de tu abundancia en la profundidad
de tu glorioso y gran amor.
Quiero ser parte del beso
de tu amor, y del canto
de la vida, que acaricia
mi ser… aquí tendida,
sintiendo el calor que me abraza.

Y que no me lastima,
quiero formar parte de ti,
que te fundes con el azul del mar,
y que siendo uno con el cielo,
aún así te puedo encontrar…
Porque estás aquí,
a mi lado, donde siempre
has estado, y que si
amenazo con alejarme,
enseguida, me tomas de la mano.

Ana María Moreno Pérez
2 agosto de 2008

No hay comentarios:

Publicar un comentario